En los últimos años diversas investigaciones han puesto de manifiesto el papel que los ácidos grasos poli-insaturados juegan en la función y estructura de las membranas neuronales. Algunos autores atribuyen a anomalías en el metabolismo de estos compuestos un papel relevante en la fisiopatología de la esquizofrenia.

Los ácidos grasos poli-insaturados (PUFA) pertenecen al grupo de los ácidos grasos esenciales, llamados así por tratarse de compuestos que no pueden ser sintetizados por el cuerpo humano y por tanto deben ser aportados en la dieta.

Así, una dieta rica en PUFA podría tener un papel benefactor en el curso de la enfermedad.

Esta hipótesis ha incentivado el desarrollo de ensayos clínicos que evalúen el papel terapéutico que los ácidos grasos poliinsaturados en la esquizofrenia. En la actualidad existen varios estudios en los que se ha investigado el beneficio que los pacientes afectos de esquizofrenia pueden obtener de la suplementación con ácidos grasos omega-3.

El objetivo del presente trabajo es realizar una revisión sistemática de los ensayos clínicos aleatorizados que comparan ácidos grasos Omega-3, Ácido eicosapentaenoico (EPA) o Ácido docosahexaenoico (DHA) contra placebo en el tratamiento de la esquizofrenia y el trastorno esquizoafectivo.